12/10/08

segundo domingo de octubre de 2008

Parece que necesitamos vivir con reglas, necesitamos una libertad acotada, pequeñita, medida, preestablecida porque si no, nos perdemos.
La libertad total destruye nuestra columna vertebral y nos convierte en amorfos sin rumbo flotando en gravedad cero.


No hay comentarios:

Publicar un comentario