19/10/08

tercer domingo de octubre de 2008

Primero el golpe que te gira la cara y luego desandar sin sombra lo apostado.
Creí que con esperar, la espera moriría. Pero mi vida es esa espera y los satelites de esos miles de pequeñas esperas que la conforman. Un tejido de interminables momentos que preceden mas momentos interminables.
Primero el golpe que descoloca tu cara y luego reconducirte desde ese nuevo horizonte.
He pisado tantas veces mi sombra en mi errático andar que ya ni ella me sigue. Me dejo la sangre en cada bocado y se que siempre habrá quien me haga llorar.
Solo queda esperar.

12/10/08

segundo domingo de octubre de 2008

Parece que necesitamos vivir con reglas, necesitamos una libertad acotada, pequeñita, medida, preestablecida porque si no, nos perdemos.
La libertad total destruye nuestra columna vertebral y nos convierte en amorfos sin rumbo flotando en gravedad cero.