9/3/08

segundo domingo de marzo de 2008

Deseamos a la persona perfecta para compartir nuestra vida, para envejecer juntos. Pero ¿No es el deseo justamente eso? ¿Algo que no tenemos? Y ante la imposibilidad buscamos encontrar durante toda nuestra vida algo que se le parezca.
Todo debería ser más sencillo. ¿Y si soy yo el que lo complica todo? ¿Y si el truco del deseo fuera simplemente saberlo imposible?


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